Abrazo “Miguelgrauino” en Lima
Escribe, Efraín Gómez Pereira
Había más de un abrazo pendiente entre los Miguelgrauinos que residen en Lima. Las escasas ocasiones en las que los amigos se pueden juntar para recordar y celebrar fechas especiales, afrontaron vallas difíciles de franquear.
Una costumbre arraigada en el corazón rojo y la agenda de los abanquinos-Miguelgraunios, que todos los años se abrazan a los sones del emocionante y vibrante “Gloria a Grau”, no pudo seguir la rutina anual, a causa de la pandemia que cerró no solo muchas vidas, sino esperanzas y encuentros esperados y postergados.
Después de tres años de espera, finalmente, el pasado domingo 15, una semana después de la fecha jubilar del glorioso colegio Miguel Grau de Abancay, que celebró 134 años de existencia institucional, los exalumnos del Miguel Grau, pudimos mirarnos cara a cara, brindar con emoción y festejar el abrazo esperado, al compás de música del recuerdo, que nos trasladó a las calles de Abancay y a los vericuetos del Chinchichaca.
Los recordados “Cherris” con Pepín y Rolando, arrancaron aplausos de nostalgia y recuerdos. Margoth Gutiérrez hizo loas a Grau y Apurímac. La voz juvenil y contagiante de Gabriela Pass, sobrina de Paco Sotelo, nos llevó a las pistas de baile. Los más de un centenar de pikis convocados charlaban en sus respectivas mesas, oteando el ayer de las aulas del Grau y festejando la vida, con amigos de décadas y más. Un salud, con pisco, vino o cerveza, se repetía apagando las ansias de los sedientos. No hubo chicha de jora, por lo que El Carrizal y el Arpachayoc, se hicieron extrañar doblemente.
Javier Ramírez Infantas, gestor de la convocatoria, resumió en breves minutos, el calor del reencuentro, recordando su paso por las aulas en el viejo local de la avenida Arequipa y, en su momento, de las recién estrenadas del local de Chinchichaca, destacando emocionado la “marcha de las carpetas”, en 1962, que debió ser memorable.
Nos invitó a cantar “Gloria a Grau, quien triunfante pasea, por los mares el patrio pendón bicolor… Que cual llama sagrada flamea, entre el humo y el tronar del cañón…”
Hugo Viladegut, la voz del Perú, ensayó una apretada semblanza sobre el valor histórico del colegio, su importancia regional y el por qué sus exalumnos sentimos orgullo aquí o allá. La valía de los maestros que dejaron huella, fue destacada con agradecimiento.
La tarea de rescatar y continuar con el reencuentro miguelgrauino en Lima, se encargó a la Promoción 75, con la responsabilidad personalizada en el dinámico, Percy Salcedo.
La Promoción 75, que está ad portas de celebrar sus Bodas de Oro, asume este encargo con una responsabilidad que debe hermanar la actividad limeña del 2024, con el recibimiento del Estandarte -de manos de la Promoción 74- que simboliza la tarea de organizar las celebraciones del 2025, en Abancay.
Precisamente en esa lógica, se dieron los primeros pasos para la implementación de ambas tareas. La noche del reencuentro en el Club Cusco, nos permitió a Percy, Iván Miranda, Francisco Sotelo, Raúl Castillo, Marco Samanéz, José Luis Miranda y Efraín Gómez, fortalecer la agenda y proyectar reuniones de trabajo permanentes, en Lima y Abancay, buscando diseñar un derrotero con actividades culturales, académicas, deportivas y de confraternidad.
Lima y Abancay, serán centro de operaciones de los sesentones de la Promoción 75 A, B y C, que trabajan por hacer una jornada para el recuerdo. “Salgan muchachas a sus balcones, que los Grauinos han de pasar…”
(Fotografías del Fanpage de Hugo Viladegut)